Nuevas tecnologías y coherencia cristiana

Lic. Oscar Luis Camacho

Director de Formación Integral de UNIS Business School

23 de noviembre de 2020

La computación, internet y telefonía móvil, pueden ser un valioso instrumento para la práctica de las virtudes propias de un cristiano.

Bien sabemos que como fuente de grandes posibilidades y opciones, estas nuevas tecnologías amplían el conocimiento sobre distintos temas: noticias, métodos de trabajo, oportunidades de negocio, etc., muy útiles para personas que deben decidir sobre diferentes situaciones; podemos sacar provecho de que la información se procese y actualice con rapidez, se difunda por el globo con facilidad, y esté disponible en cualquier sitio, incluyendo, desde luego, el teléfono móvil que tenemos en la palma de la mano.

Con su correcto uso, debemos aprovechar los beneficios derivados del ambiente digital: mantener un mayor contacto con familiares y amigos, aunque estén muy lejos unos de otros; también, para estudiantes e investigadores, la posibilidad de un acceso fácil e inmediato, a novedades científicas, sus fuentes y documentos. A los educadores, ofrece formas más dinámicas de comunicación, de enseñanza y aprendizaje que contribuyen al progreso social. (Citando a Benedicto XVI en su mensaje a xliii Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales. NUEVAS TECNOLOGIAS, NUEVAS RELACIONES. 24 de mayo 2009)

Nuestro modo de movernos en el ambiente digital debe ser coherente con nuestra vida de cristianos en la familia, la empresa y la sociedad.

Como sabemos, no es propio de un cristiano llevar una doble vida, actuando de un modo en el mundo virtual y de otro en el mundo real. Viviendo la unidad podemos convertir nuestra libertad, en «una fuerza de crecimiento y maduración en la verdad y la bondad» (catecismo de la Iglesia Católica), reflejo de la autenticidad propia de quien vive ejerciendo las virtudes.

San Josemaría nos enseña a vivir nuestra realidad: “Dejaos, pues, de sueños, de falsos idealismos, de fantasías, de eso que suelo llamar mística ojalatera: ¡ojalá no me hubiera casado, ojalá no tuviera esta profesión, ojalá tuviera más salud, ojalá fuera joven, ojalá fuera viejo!...–, y ateneos, en cambio, sobriamente, a la realidad más material e inmediata, que es donde está el Señor” (san Josemaría. CONVERSACIONES N116)

La tecnología debe ser lugar para buscar nuestra santidad y hacer apostolado. Actuar en la red como una “extensión” de la propia vida cotidiana, e influir en los demás y enseñar a desenvolverse con autenticidad cristiana. Esto implica para el cristiano, obrar, también en el entorno digital, de tal manera que quienes le traten perciban el bonus odor Christi , el buen olor de Cristo. Así, a través de las acciones del discípulo, puede descubrirse el rostro del Maestro. (san Josemaría ES CRISTO QUE PASA 105)

En el ambiente de la tecnología, nuestra condición de cristianos nos debe distinguir por no participar de la tendencia a usar el anonimato y lo que sería peor, una identidad falsa con fines oscuros, como suele ocurrir frecuentemente.

Al llevar siempre nuestra propia identidad cristiana, vivir las virtudes y ser almas de criterio, podemos usar la tecnología para ayudar a otros y ser mejores personas.

Resumen basado en el articulo “Nuevas tecnologías y coherencia cristiana” J.C. Vásconez– R. Valdés.
https://opusdei.org/es-es/article/nuevas-tecnologias-y-coherencia-cristiana/